Constantine descubre que una nueva fuerza, posiblemente un ángel corrupto o un demonio de alto rango (se rumorea que podría ser Azazel u otro personaje del cómic de DC), está conspirando para borrar las fronteras entre el cielo, el infierno y la tierra, creando un mundo caótico donde las reglas ya no existen. Para detener esta catástrofe, se une a regañadientes con viejos aliados como Chas Kramer (Shia LaBeouf, quien podría regresar) y un nuevo personaje: un joven profeta o mago con habilidades especiales.

El viaje lleva a Constantine a enfrentarse a enemigos más poderosos que nunca, obligándolo a usar su ingenio, magia oscura y sacrificio personal. La película promete mantener la atmósfera sombría y sobrenatural de la primera parte, mientras expande su escala con batallas épicas entre fuerzas angélicas y demoníacas. Un momento destacado esperado es el reencuentro entre Constantine y Lucifer (Peter Stormare), donde ambos podrían tener que aliarse temporalmente para enfrentar una amenaza común, dando lugar a diálogos ingeniosos y llenos de tensión.